Según un estudio realizado por científicos del Instituto Perimeter de Física Teórica, el Universo podría haber surgido de un agujero negro en un universo de dimensiones superiores.
Estos expertos señalan que antes del Big Bang se pudo dar otro gran suceso. Lo que hasta ahora se había considerado como un gran cataclismo podría ser el «espejismo» tridimensional de una estrella que colapsa en un universo diferente al actual.
Según Niayesh Afshordi, uno de los autores de este estudio, «el mayor desafío de la Cosmología es entender el propio Big Bang». Afshordi ha explicado que la comprensión convencional sostiene que el Big Bang comenzó con una singularidad: un fenómeno insondable caliente y denso del espacio – tiempo donde las leyes normales de la física se rompen. Por ello, reconoce que las singularidades de este evento son extrañas y, por lo tanto, de comprensión limitada.
Para Afshordi la hipótesis del Big Bang resulta poco probable, pues considera que tuvo que pasar algo más. A su juicio, el Universo actualmente conocido podría ser el «envoltorio» tridimensional alrededor de un agujero negro de cuatro dimensiones. En este escenario, el Universo nació cuando una estrella en un universo de cuatro dimensiones colapsó en un agujero negro.
Estos investigadores defienden la idea del nacimiento del Universo a partir de un agujero negro. Explican que, aunque pueda sonar «absurdo», todo se basa en el mejor conocimiento de las matemáticas modernas, las cuales describen el espacio y el tiempo. En concreto, han hecho uso de la holografía para «convertir al Big Bang en un espejismo cósmico».
De igual forma, los investigadores han explicado que no hay conocimiento de lo que podría ser similar a un universo de cuatro dimensiones, así como tampoco de cómo sería un universo «padre» de cuatro dimensiones.