Solo en los primeros cinco meses de 2017, ya se había superado la superficie quemada en España en ese periodo desde 2012. Los expertos temían la llegada del verano en un año marcado por la falta de lluvias y el calor. La sequía ha sido especialmente dura este año. En el Cantábrico y en la zona occidental de la península las lluvias han sido muy pobres.
A estas alturas del verano los incendios forestales han calcinado en nuestro país cinco veces más de la superficie forestal quemada en 2016, en total ardieron 55.918 hectáreas . El 64,6% de la superficie quemada pertenece a la zona noroeste de la península.
En la primera mitad del año se habían producido un total de ocho GIF (Grandes Incendios Forestales, es decir incendios que superan las 500 hectáreas), superando de largo la media de cuatro GIF de los últimos diez años.
Desde el 1 de enero de este año se han registrado 7.791 incendios en los bosques de nuestro país. De ellos 4.481 han sido conatos, como se califica a los incendios que no llegan a quemar una hectárea y 3.310 superaron esa superficie. A consecuencia de estos fuegos el 0,202 de la superficie total de nuestro territorio se ha visto afectada. Una cifra preocupante, ya que supera considerablemente los datos de 2016, cuando la superficie alcanzada fue del 0,037.
La vegetación más afectada por estos incendios a lo largo de la primera mitad de 2017, ha sido el matorral y monte abierto, con un total de 35.000 hectáreas perjudicadas. Por su parte, 16.124 hectáreas corresponden a superficie arbolada y 4.700 a pastos y dehesas.
Como decíamos, el noroeste de la península ha sido el más dañado por las llamas, ya que más de la mitad de los incendios (54,87%) se han declarado en la zona comprendida por Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco y las provincias de León y Zamora.
Por su parte, en las comunidades interiores se declararon el 32,02% de los siniestros y en lo que se refiere a las zonas mediterráneas se han producido el 12,77% de los incendios. Canarias ha sufrido el 0,35% de los incendios españoles en lo que llevamos de año.
En términos de superficie forestal quemada, el 64,6% pertenece al noroeste peninsular, el 15,8% a las comunidades del interior, el 19,52% al área mediterránea (incluyendo las Islas Baleares) y el 0,01% al archipiélago canario.