Finalmente la subida de tipos de interés se ha producido. El pasado miércoles 16 de diciembre de 2015, Janet Yellen, presidenta de la Reserva Federal de Estados Unidos anunciaba una cauta subida hasta el 0,25%, la primera desde hacía casi una década.
La última subida de tipos se produjo en 2006 (llegaron a superar el 5%), pero desde 2008 por la recesión económica se bajaron hasta el 0% con el fin de incentivar la economía. 7 años después se dice de forma muy tímida que la crisis ha llegado a su fin, que se ha solventado el peligro de una recesión, pero sigue la incertidumbre imperante.
De hecho, los mercados no reaccionaron abruptamente ante esta esperada subida de tipos de interés que, se espera, situará al dólar como la moneda más fuerte en el mercado de divisas. Venía anunciándolo desde un glorioso mes de julio donde parecía que todo eran buenas noticias para la moneda norteamericana, sin embargo las idas y venidas del Forex por una recuperación milagrosa del euro y el derrumbe económico de China, frenaron la decisión anunciada de subir los tipos de interés.
Ciertamente, todos los analistas coinciden en que una de las razones de cumplir la palabra de subir los tipos antes de que terminase el año se basa también en una cuestión de credibilidad, algo que ya estaba en entredicho cuando no se ponían de acuerdo en indicar fechas concretas para esta subida de tipos de interés.
La libra, por su parte, también participó en la jugada de anunciar subidas de tipos de interés, pues los suyos se mantienen en el ostracismo inamovible, pero al final quedó descartado, minando con ello la confianza de los inversores sobre la moneda británica.
Consecuencias de las subidas de tipos de interés en Estados Unidos.
La consecuencia más clara de esta subida de tipos de interés es que el euro va a debilitarse con respecto al dólar durante principios de 2016. Se cree que esta subida se mantendrá, como mínimo, a medio plazo, lo que sitúa al euro en una situación de necesaria respuesta monetaria efectiva para mantener cierta fortaleza.
Además, habrá menos liquidez en los mercados, algo que afecta desde este preciso momento a las inversiones de mayor riesgo. Sin embargo, se potenciará el turismo de estadounidenses y se limitarán las exportaciones desde este país.