Que el mundo digital avanza a un ritmo vertiginoso no es ninguna novedad. Cada día escuchamos casos como el de Mark Zuckerberg, que pasó de ser un tímido estudiante a uno de los hombres más ricos del mundo gracias a Facebook. O el de Steve Jobs, quien consiguió convertir en una exitosa multinacional una empresa nacida en un garaje durante su época universitaria. Sin embargo, sin necesidad de cruzar fronteras, en nuestro país encontramos muchos casos de éxito en el mundo 2.0. Desde startups creadas al abrigo de internet hasta pequeñas empresas de todos los ámbitos que han dado el salto a la esfera digital.
Uno de estos casos de éxito es el de la valenciana Naranjas Florazar una pequeña empresa familiar de la huerta levantina que ha sabido aprovechar las oportunidades que ofrece internet, tanto en el ámbito comercial como en el de difusión de marca. Lo que hace unos años muchos consideraban impensable, comprar naranjas directamente del productor sin salir de casa y recibirlas en nuestro domicilio a las pocas horas, se ha convertido en una realidad gracias a éstas y a otras firmas que han apostado por las nuevas tecnologías para actualizar y potenciar negocios de toda la vida, como pueden ser los vinculados al sector agrícola.
Pero no sólo las empresas del sector primario se han beneficiado del impulso que ofrece internet y el mundo 2.0. También el comercio ha encontrado en este mundo una nueva vía para aumentar sus clientes potenciales, dar a conocer una determinada marca o producto o internacionalizar sus ventas. Sin ir más lejos, grandes empresas textiles, como Zara o Mango, tienen en el sector digital una dura competencia para sus tiendas: sus propias webs. Y es que, si bien la compañía de Amancio Ortega, no es muy amiga de difundir sus datos de ventas online, hay quien apunta a que la facturación de su ecommerce no para de crecer, hasta el punto que la web de Zara se ha convertido en la tienda del grupo que más vende con diferencia.
Según los últimos datos disponibles en el Registro Mercantil, las ventas online de las webs del grupo Inditex en Europa ascendieron a 227,4 millones de euros en 2013. Una cifra que, presumiblemente, se ha incrementado en los años siguientes, siguiendo la tendencia general del sector del ecommerce.
Sea como fuere, lo cierto es que, tanto si hablamos de pequeñas empresas como Florazar o de grandes conglomerados, como Inditex, el mundo digital ofrece un sinfín de posibilidades para las empresas de todos los ámbitos y sectores. Unas oportunidades que deben aprovechar para no quedarse atrás en un mundo en constante cambio.
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