Un grupo de científicos de la NASA ha determinado que Marte tuvo hace alrededor de 4.500 millones de años un océano que ocupó el 19% del planeta, aunque su volumen podría haber cubierto al planeta por completo.
Este equipo de científicos calcula que si el océano se hubiera extendido de manera uniforme, con una profundidad de 137 metros, éste podría haber cubierto la superficie de Marte por completo.
Sin embargo, se cree que este océano marciano se concentró en las planicies del hemisferio Norte, cubriendo tan solo el 19% del planeta. Además, se calcula que este océano pudo registrar una profundidad de 1,6 kilómetros de profundidad en algunos puntos.
La extensión de este océano marciano sería mayor que la del mayor océano de la Tierra, el Océano Atlántico, que ocupa el 17%.
Para conocer estos nuevos datos se han empleado el observatorio europeo en el desierto de Atacama, el observatorio W.M Keck en Hawai y el Telescopio de infrarrojos de la NASA situado también en Hawai.
Los investigadores lograron analizar la huella dejada por dos partículas de agua diferentes en la atmósfera de Marte: la partícula del agua común H2O y la partícula de HDO, una variante más pesada del hidrógeno. El equipo descubrió que mientras el agua común tiende a escapar al espacio, el agua más pesada queda atrapada en el ciclo de agua marciano.
Comparando la proporción de HDO y H2O en los meteoritos de Marte con 4.500 millones de años de antigüedad se puede medir la cantidad de agua que ha escapado al espacio y a qué velocidad, lo cual da una idea de cuánta agua hubo.
Con este descubrimiento se demuestra que Marte fue mucho más húmedo de lo que se pensaba, por lo que se aviva la teoría de que en algún momento Marte albergó las condiciones necesarias para la evolución de la vida.
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