Reedición del clásico Barça-Madrid con empate a 2

Un partido entre Barcelona y Real Madrid es siempre un acontecimiento para los aficionados al fútbol. En esta ocasión ninguno de los dos equipos defraudó, aunque ninguna de las dos hinchadas pudiera celebrar la victoria.

Barça y Madrid empataron a 2 en un partido vibrante, en el que el Madrid presionó y el Barça supo contenerlo y mantener su condición de invicto. Hay que señalar que el equipo blanco jugó con superioridad numérica durante buena parte del partido, debido a la expulsión de Sergi Roberto.

Lo cierto es que el Madrid estuvo cerca del triunfo pero se encontró enfrente a un Barça colosal, que no quería ceder ni un palmo. A pesar de ello, el Barcelona no rayó a la altura de otras grandes ocasiones, aunque hay que reconocer que se batió de forma efectiva para sus intereses.

El club azulgrana fue el primero en adelantarse en el marcador, después de un arranque de partido verdaderamente trepidante. Luis Suárez marcó el gol tras un centro de Sergi Roberto. Sin embargo, la contestación madridista no se hizo esperar. La superestrella Cristiano Ronaldo se apuntó el tanto del empate.

Después de establecido el 1-1, el delantero portugués remató con peligro en un par de ocasiones, pero sin que le acompañara la suerte. En todo este tramo del partido el Madrid dominó y el Barça llegó a desdibujarse en su propio campo.

De hecho no tuvo el club azulgrana ninguna oportunidad de gol ni jugadas de peligro y así transcurría el encuentro cuando entró en su fase más sucia y bronca que el árbitro a duras penas pudo controlar.

Así pues, Sergi Roberto vio la tarjeta roja y, sin embargo, el lateral madridista Bale fue poco menos que perdonado. Se hicieron entonces varios cambios en ambas formaciones, siendo el dominio de color blanco en todo momento.

Pero fue entonces cuando Luis Suárez robó un balón y asistió a Messi para adelantar a su equipo en el marcador. A partir de entonces el Madrid se impacientó y se lanzó a un ataque desordenado que no daba sus frutos.

Llegó un tercer gol del Barça, por obra y gracia de Suárez, que fue anulado por fuera de juego (dicen muchos que fue inexistente), hasta que el lateral madridista Bale materializó el empate a 2, con un gol por la escuadra aprovechando un pase de Asensio.

Con este resultado el Barça aumenta sus posibilidades de acabar la liga sin conocer la derrota.