Es posible que si vas a hacer un regalo pienses en paseos en globo. Casi todas las ciudades tienen esa actividad considerada ocio y placer para disfrutar de una aventura diferente. Y puede que alguna vez hayas mirado al cielo de un paisaje más bien rural o natural donde un globo aerostático cruzaba sobre el horizonte.
Son los paseos en globo en Madrid, Sevilla o Segovia, o tantas ciudades en España que ven surcar sus cielos a esos enormes barcos aéreos con unas cuantas personas a bordo que no paran de maravillarse por las vistas y la experiencia.
Es una experiencia única, incluso un sueño que ya se puede hacer realidad gracias a empresas de ocio que comenzaron hace unos años a ofrecer esta actividad lúdica incomparable a ninguna otra.
Tanto en zonas rurales como en las ciudades se puede acceder a paseos en globo pero se llevan a cabo en espacios abiertos, la mezcla perfecta de naturaleza y aventura que no comprometa la seguridad de nadie.
Por eso no se sobrevuelan los núcleos urbanos en los paseos en globo.com, para evitar posibles imprevistos, los cableados y cualquier contacto con obstáculos que acaben mal.
No hace falta encontrar muchas excusas para buscar paseos en globo por tu ciudad u otra donde quieras dirigirte un fin de semana. Hay varias empresas en la capital que las organizan por un precio más que razonable. Si es un sueño para el hombre el hecho de poder volar, es lo más parecido a realizar este deseo, pero al ser algo tan singular, se presenta como una extraordinaria sorpresa para los sentidos.
La paz y el silencio, unidos a la suave brisa que mece la nave aerostática, consiguen que los paseos en globo sean una aventura de corte casi místico. Para los que siempre suspiraron por vivir algo semejante y nunca perdieron la esperanza de volar sobre la tierra en contacto con el viento y el sol, ahora podrán hacerlo.
El despliegue de la vela y la elevación de la misma por el efecto del aire caliente que expele el ventilador es ya una sensacional visión. Y dar el paso para subir a bordo es una experiencia de las que hacen latir fuerte el corazón. Pronto se pierde el miedo a volar cuando la tierra se aleja más y más y se avanza a través del éter.
Suelen ser días limpios de primavera los que más invitan a los paseos en globo. Temperaturas suaves, ausencia de nubes ni vientos bruscos hacen de estos paseos un recorrido eterno y fugaz a la vez, como si el tiempo se hubiese vuelto loco al levantar el vuelo.
Si buscas sorprender a una persona en especial, si quieres pasar un dia de cumpleaños fuera de las fiestas habituales o necesitas cumplir un sueño desde la infancia, darse este capricho de los paseos en globo está al alcance de cualquiera. En la provincia de Madrid, Segovia o Guadalajara, por decir provincias limítrofes y cercanas, se contratan estas rutas aéreas que simulan el primer viaje en globo del hombre.
Solo es necesario plantear la búsqueda en internet y aparecen varios resultados por provincia, así que ni es difícil contactar con empresas dedicadas a paseos en globo ni vas a poder resistirte a contratarlos. Porque habrá un antes y un después de la experiencia y porque hasta hace muy poco parecía algo reservado solo a aficionados. Aunque es cierto que cualquiera no dispone de la licencia para volar ni dispone de una nave aerostática, al menos los paseos en globo se han convertido en un pedazo de ocio singular pero accesible para todos.
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