El alquiler de buses como lucrativo servicio para empresas e instituciones

La necesidad de transporte es un aspecto de prioridad para compañías e instituciones, que, si cuentan con un estado financiero favorable, pueden costearlas sin problema, pero que para las medianas empresas y las Pyme, esto es sencillamente imposible.

Las razones son claras: las pequeñas y medianas empresas simplemente carecen del presupuesto, y quienes pueden comprar al menos un autobús, se le da tanto uso como sea posible, corriéndose el riesgo de sobreexplotarlo como recurso de limitada vida útil.

Desde el punto de vista de mercadotecnia, esto es claramente una oportunidad de negocios; el hecho de que existan compañías que necesiten autobuses y no puedan pagar por los que necesitan, significa que un negocio de alquiler de autobuses tendría rentabilidad.

Ideas disparatadas como esta, han dado lugar a compañías exitosas que alquilan autobuses a las empresas que lo necesiten, sin restringirse a las pequeñas y medianas, sino también apuntando a las grandes compañías también.

¿Qué necesidad tiene una compañía grande en alquilar autobuses si puede pagarlos?

Esta pregunta es fácil de responder, y para ello se toma en consideración el caso de las empresas que necesitan transporte masivo muy esporádicamente. Un ejemplo son los eventos extraordinarios en los que necesitan movilizar gran cantidad de personas.

Como un aniversario particular (25 años de labor, la despedida de algún fundador que va a retirarse, etc), o unas vacaciones colectivas organizadas por la empresa. En casos como esos, no se disponen de los autobuses necesarios (y puede que de ninguno), y es presupuestalmente más óptimo alquilarlos que comprarlos.

Este mismo fenómeno ocurre con las compañías que son más pequeñas, y que el poder alquilar unidades de transporte solo cuando lo requieran, les da una oportunidad para invertir en aspectos más críticos en su estrategia comercial.

Un amplio umbral de servicios de alquiler de autobuses

Actualmente, el umbral de servicios alrededor del alquiler de autobuses es bastante amplio; tener unidades estándares para todos los clientes no es una opción, como bien podemos ver en servicios similares a compañías como Grupo Ruiz.

Lo que ésta y muchas otras de su tipo hacen, es ofertar tipos de unidades de diferente número de pasajeros y de variada comodidad; inclusive, se habla de autobuses especializados, como es el caso de los de rutas escolares, que consisten en autobuses especiales para transportar estudiantes.

Los modelos disponibles también incluyen sus versiones lujosas, que son necesarias en casos como el del transporte para ejecutivos o para invitados especiales en convenciones y eventos importantes. Y todo esto negociable en cualquier ámbito.

No solo de alquilar autobuses viven estas empresas

Una de las características de algunos servicios de alquiler de autobuses es que éstos también sirven para propósitos que van más allá del alquiler de unidades. Los catálogos primarios de empresas como Grupo Ruiz es el de alquilar unidades según las necesidades del cliente.

Esa es la razón por la cual existen gran variedad de modelos de autobuses y no solo hablando del lujo y del aspecto, sino también en relación a las distancias que deben recorrer. Por lo cual, existen unidades ideales para viajar.

Éstas son ideales cuando se organizan viajes familiares a localidades relativamente distantes; pero ¿Qué hay del aprovechamiento de estos clientes como público objetivo potencial de ventas? Los aspectos de mercadeo pueden aprovechar esto para hacer publicidad especializada.

Los planes publicitarios suelen ofrecerse en 2 formas particulares, una de ellas es en el exterior de los autobuses, que puede ser fuente de publicidad. Esta forma de publicidad puede hacer que una campaña de mercadeo llegue al grupo objetivo que se encuentra alrededor de las rutas programadas con los clientes.

Pero esta estrategia no es solo aplicable para el exterior de las unidades, pues, de hecho, quienes entran en los autobuses también representan un público objetivo potencial, aunque en este caso, existe la libertad de que los clientes paguen por no ver publicidad.

Y en este caso, se hace doble negocio, pues pagar una cuota adicional para no ver publicidad permite que las empresas de alquiler de autobuses tengan un ingreso extra y a la vez eso permite abaratar algunos servicios que sean a modo de oferta.

Un ejemplo serían descuentos especiales para instituciones educativas y para fundaciones sin fines de lucro.